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Constelaciones Organizacionales (I): Empresas orientadas al éxito.



¿Qué son las Constelaciones Organizacionales?


Las constelaciones o configuraciones organizacionales son una herramienta de análisis de problemas y toma de decisiones en el ámbito de la Consultoría de Empresas y Organizaciones. Sorprendentemente desconocidas a pesar de su eficacia, han sido desarrolladas en Alemania a partir de la filosofía sistémica de Bert Hellinger y su aplicación se expande a las grandes corporaciones y empresas de muchos países, especialmente en Europa y Latinoamérica.

Las constelaciones organizacionales trabajan además, como se ha indicado, desde una visión sistémica. Una empresa es un sistema complejo de personas, elementos y jerarquías, que pueden estar ordenados o en desequilibrio. Todo está interconectado y todo pertenece y se relaciona. La empresa no es una excepción a esta visión sistémica y en ella tambien está todo interconectado, tanto interna como externamente y todos los elementos tienen su efecto en el resto del sistema. Recordando el antiguo proverbio chino: «el leve aleteo de las alas de una mariposa se puede sentir al otro lado del mundo».


Así, del mismo modo que a nivel organísmico, un esguince de tobillo puede estar provocando una cervicalgia, la mala relación entre los empleados del departamento financiero, puede estar ocasionando un descenso en las ventas de los equipos comerciales, o la precariedad económica que hubo en la familia de origen de uno de los socios, puede proyectarse en la limitación de ganancias de la empresa, por poner algunos ejemplos. Comprender los principios sistémicos que rigen la vida de la empresa como sistema, permite entender el origen de muchos conflictos ocasionados cuando tales principios no son respetados.


Podemos tener una percepción confusa o tener una visión clara de los problemas de la empresa y su origen. La visión sistémica nos permite ver esa parte de la realidad que generalmente pasa desapercibida y nos conecta con la vida emocional de la empresa, con las emociones de sus elementos, tanto de las emociones que impulsan a la organización como de las que generan resistencias que bloquean actividades y proyectos.


​Las configuraciones organizacionales no trabajan con lo racional y lo obvio, sino con la información desatendida. Traen al primer plano información colectiva -normalmente relacionada con los grandes paradigmas de la empresa- inconsciente u olvidada, sacándola a la luz y permitiendo, a partir de ahí, empezar a gestionarla.


En el trabajo sistémico se observa lo que sucede, pero no solo a cada individuo o elemento en sí, sino a todos en su contexto, como elementos vinculados a las dinámicas de la empresa. Esto nos permite acceder también a campos de información colectiva. Todos los elementos y personas de la empresa u organización forman parte de la misma. Todos pertenecen y es necesario incluirlos a todos. Si no se hace, parte de la información quedará excluida y la visión de la dinámica organizacional será incompleta.

Y toda esta información no se extrae de largas sesiones de sesudas descripciones analíticas, sino a través de imágenes de solución, en ocasiones muy simples. Podríamos definirlo como un trabajo de observación: mirar lo que está sucediendo. Y esto es lo que hace especial a este trabajo, que saca a la luz dinámicas profundas que no por no verse, no significa que no existan y que no estén produciendo su efecto en la vida y resultados de la empresa. Podríamos afirmar en este caso, que lo invisible mueve los hilos de lo visible.


Esta herramienta no incorpora nuevas técnicas de gestión de equipos, o innovadores protocolos de marketing, comunicación, finanzas, etc. Las constelaciones organizacionales no pretenden rivalizar con nada de lo anterior y, sin embargo, impulsan y promueven todo lo anterior. Dicho de una manera sencilla, las constelaciones organizacionales sirven para ver la realidad. Sirven para que el responsable o directivo se haga una imagen clara de la situación real de su organización, de la posible solución y del camino a seguir, desde un enfoque creativo, natural y armónico.



¿Cómo funcionan las Constelaciones Organizacionales?

​El trabajo se lleva a cabo de una manera directa y sencilla, que consiste en la representación espacial del conflicto o situación concreta que está atravesando la empresa; es decir, el empresario, director o gerente va a ver su asunto visualizado desde una perspectiva global y disponiendo de una información que antes “no existía”. De dicha representación surge una comprensión natural del asunto, que abre a su vez sorprendentes y, generalmente, sencillas vías de solución, que antes no se contemplaban.

No se trata de imaginación o actuación teatral, y en eso se diferencia del juego de roles o del psicodrama, sino de acceder a campos de información reales y activos. Son los propios participantes -o el propio participante, si se trata de una sesion individual- los que, acompañados y guiados en todo momento por el terapeuta o consultor, van a representar a las diferentes personas, departamentos, clientes, productos... etc. que están implicados en el conflicto, obteniendo información a través de su propio sentir y percepción corporal (dar la espalda a un cliente, por ejemplo).



¿Qué ocurre después de una constelación organizacional?

En el mundo de la empresa como en otros ámbitos, no hay soluciones perfectas ni definitivas. No existen las soluciones milagrosas. Pero sí existen las soluciones temporales, que nos llevan a otros escenarios más avanzados donde comenzaremos nuevos desarrollos, que a su vez presentarán nuevas dificultades emergentes, que también habrá que afrontar y cuya resolución exigirá a su vez más aprendizaje. En eso consiste el crecimiento. Este es el proceso que se inicia con este tipo de intervención.

La constelación organizacional sólo será, por lo tanto, el punto de partida al que seguirán, tras el desbloqueo previo de la información desantendida, los correspondientes pasos operativos que haya que poner en marcha para materializar la solución del asunto y que anteriormente, parecían estar estancados o no ser acertados. Es como andar a oscuras. Se hace torpemente, con mucha tensión y gasto energético, de forma desordenada y caótica, sin avances concretos en una dirección determinada. Pero una vez que se ilumina el camino y se muestra la dirección correcta, andar es fácil. Cuando tiene un sentido comprensible y diáfano, cualquier proyecto resulta más sencillo de llevar a la práctica.



Constelaciones Organizacionales (II): Empresas orientadas al éxito.


Manuel Goizueta López es Psicólogo y Licenciado en Derecho. Ha trabajado durante 17 años en puestos directivos y comerciales de diversas entidades financieras. Formación en Gestión y Dirección de Empresas, Gestión de RR. HH. y Gestión Comercial. Máster en Mediación y Gestión del Conflicto y Máster en Psicología General Sanitaria. Se dedica desde 2015 al ejercicio profesional de la psicología y la consultoría, como especialista en configuraciones organizacionales y constelaciones familiares. Es funcionario de carrera del Cuerpo Facultativo Superior de Especialistas Psicólogos de la Diputación General de Aragón.


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